
Cuando el rojo otoño
se anuda en mi pupila,
y el tibio sol se repele
en el aliento frío
de la fuente que es mi boca,
y se trastoca en ese vaho
que sobre el vidrio de la ventana de la noche
escribe su nombre
.No son lágrimas las que de blanco
cubren los techos de los recuerdos,
no son lágrimas,
las que se congelan
bajo la lluvia de suspiros,
son bengalas que alumbran,
la soledad de este camino.
Si sus manos no temblaran
para dibujar en la noche,
los bordes de este amor,
si tan sólo pudiera deshojar
estrellas rutilantes y ardientes…
y lejanas.
Si tan sólo…
entonces,
hallaría la fuerza
para gritar a los montes
que las noches se han quedado
solas y sin sombras,
con la luna trastocada en un nuevo sol…
Si tan sólo……
los sueños fueran prohibidos
las lágrimas serían los diamantes
con que orlaría mi frente,
y el frío
el aliento con que una y otra vez
pronunciaría su nombre
Si tan sólo…
Los ecos de los abismos callaran su voz,
mi voz sería el trino de las aves,
que en su canción cuentan
cuánto le amo…
si tan sólo…
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